En Chile, el Qhapaq Ñan se extendió desde el norte hasta la zona central del país, abarcando más de 2.000 km. Una muestra representativa de 112 km y 138 sitios arqueológicos están protegidos como Patrimonio Mundial en cuatro comunas de tres regiones del norte del país: Arica y Parinacota (Putre), Antofagasta (Calama, San Pedro de Atacama) y Atacama (Diego de Almagro), y está asociado con al menos 10 comunidades indígenas y locales.
En la Región de Antofagasta, el Qhapaq Ñan se extendió por la zona del Alto Loa y en el Salar de Atacama. Los tramos protegidos como Patrimonio Mundial están en las comunas de Calama y San Pedro de Atacama. El Qhapaq Ñan al ser una red de caminos es una red de vidas presentes, pasadas y futuras, una fuente de intercambio cultural y una muestra de que podemos compartir entre comunidades para avanzar en conjunto. Estos caminos milenarios nos conectan con nuestra ancestralidad y son testigos de esa herencia que se mantiene viva en nuestras comunidades. Este aniversario es una oportunidad para redescubrir nuestras raíces y celebrar la riqueza cultural que nos une, y seguir trabajando en conjunto para la protección de este invaluable patrimonio.
Desde nuestro cálido desierto y los majestuosos paisajes altiplánicos, estos caminos nos invitan a preservar en conjunto con las comunidades, por nuestra parte, a través de subsidios para Sitios Patrimonio Mundial, y de proyectos y/o asistencias Técnicas del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural y del Consejo de Monumentos Nacionales, que ya han beneficiado a las comunidades de Cupo, Lasana, Ayquina-Turi, Catarpe, Camar y Socaire.