La Convención UNESCO de 1970 contra el tráfico ilícito de bienes culturales celebra cincuenta años
Aprobada por la Conferencia General de UNESCO el 14 de noviembre de 1970, considerada el primer instrumento jurídico internacional para la protección de los bienes culturales en tiempos de paz, la Convención proporciona un marco internacional para la prevención del robo y el saqueo, como también para el fomento de la restitución y el retorno de los bienes culturales sustraídos, en paralelo con otros avances en la lucha contra el tráfico ilícito. Ratificada hoy por 140 Estados Parte, ofrece medidas que pueden abordarse en común por estos países para prohibir e impedir la importación, la exportación y la transferencia de propiedad ilícitas de bienes culturales.
Con motivo del 50º aniversario de la Convención de 1970, las instituciones alrededor del mundo reflexionan sobre su implementación por medio de campañas de sensibilización sobre las consecuencias del tráfico de arte, arqueología y otros bienes culturales, relacionado muchas veces con la financiación del terrorismo, excavaciones ilegales, robos de museos, saqueos de zonas en guerra, y la desaparición de la memoria de los pueblos afectados.
Con la publicación en el Diario Oficial, el 30 de septiembre de 2014, Chile se convirtió en la nación número 127 en suscribir la Convención, sumándose a los esfuerzos para sistematizar y fortalecer la prevención y la cooperación internacional en contra de este flagelo.
El punto focal y trabajo en Chile, en torno a la Convención 1970, se ha centrado en el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio a través de la Mesa de lucha contra el tráfico ilícito bienes patrimoniales, conformada por representantes del Consejo de Monumentos Nacionales, los Museos Nacionales, el Centro Nacional de Conservación y Restauración, la Subsecretaría del Patrimonio Cultural, la Subdirección de Museos y la Subdirección de Gestión Patrimonial, que desde 2019 alberga a la Unidad de lucha contra el Tráfico Ilícito.
La Mesa de lucha contra el tráfico ilícito de bienes patrimoniales congrega, además, el trabajo y cooperación de representantes asesores del Ministerio Público, Ministerio de Relaciones Exteriores, fuerzas policiales y del orden, el Servicio Nacional de Aduanas e ICOM (Consejo Internacional de Museos).
Los compromisos de Chile con la Convención desde 2014 a la fecha, se han concretado en encuentros de discusión y capacitación de fiscalizadores aduaneros y policiales, que han sido apoyados en forma paralela por entidades internacionales, redes latinoamericanas de cooperación, el Mercosur Cultural y la suscripción de convenios bilaterales con México, Perú, China y en forma más reciente con Ecuador. Destaca también la firma, en 2020, del Memorándum de Entendimiento con los Estados Unidos para la protección de bienes arqueológicos chilenos.
Desde la suscripción de la Convención se ha avanzado en forma sostenida en la difusión de buenas prácticas, la prevención de excavaciones ilegales y de robos de museos, por medio de actividades, publicaciones y cursos prácticos que permiten coordinar de mejor forma la labor de las instituciones, fuerzas policiales y aduaneras. La Convención también promueve la sensibilización de las casas de subastas y galerías de arte sobre temas como la diligencia debida y procedencia, así como a los ciudadanos y turistas sobre la necesidad de conocer las normativas sobre la adquisición y salida del país de bienes culturales.
El programa de desarrollo de la Convención UNESCO de 1970 hacia la agenda 2030, en torno a la protección del patrimonio cultural y la promoción de la cultura, fomenta el diálogo y el desarrollo sostenible en la protección de los bienes culturales muebles.
En cuanto a los esfuerzos desplegados por Chile en relación a la Convención, el Subsecretario del Patrimonio Emilio de la Cerda, expresa: "Este marco normativo internacional y nacional es clave no solo para establecer compromisos, obligaciones y cooperación a nivel transfronterizo, sino también para coordinar nuestra actuación dentro de Chile, en torno a una materia compleja e interinstitucional como esta. Tras la firma de este instrumento, Chile ha dado pasos relevantes que se han fortalecido con la puesta en marcha del Ministerio de las Culturas, el apoyo permanente de otras instituciones públicas y el arduo trabajo de un dedicado equipo. Las medidas para prevenir y luchar contra el tráfico ilícito de bienes patrimoniales son a su vez acciones para resguardar las historias, los valores y tradiciones que pueden relatarnos y con las que construimos memoria. Es nuestra responsabilidad seguir perfeccionando los lineamientos y herramientas en estas materias".
Por su parte, el Servicio Nacional del Patrimonio Cultural celebrará el Aniversario 50 de la Convención de 1970 con el conversatorio "Balances y desafíos a cincuenta años de la Convención UNESCO de 1970 contra el Tráfico Ilícito de Bienes Culturales", que se enmarca en el ciclo del Museo Histórico Nacional conducido por el historiador Luis Alegría, el viernes 20 de noviembre a las 12:00, en el Canal YouTube del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural. Las invitadas serán:
Lina Nagel. Coordinadora de la Unidad de lucha contra el tráfico ilícito de bienes patrimoniales. Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, Chile.
Claudia Cabouli. Directora Nacional de Bienes y Sitios Culturales. Secretaría de Patrimonio Cultural. Ministerio de Cultura, República Argentina.
Karla Fischer. Abogada de la División Jurídica del Servicio Nacional de Patrimonio Cultural.