Patrimonio mundial, géneros y territorios

Pueblo de Ayquina. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Declarado Zona Típica por el Decreto N.o 862 de 1974, el pueblo de Ayquina se encuentra a 2980 msnm, en la ladera norte de la quebrada del río Salado, afluente del río Loa. Presenta un trazado aterrazado, siguiendo la pendiente de la quebrada. En su eje central se emplazan el Santuario de Nuestra Señora Guadalupe de Ayquina y un atrio o plaza central. El poblado se caracteriza por sus calles peatonales estrechas y sus escaleras de piedra, así como por la persistencia del sistema de vivienda tradicional andina. Las formas de construir, sin embargo, han cambiado: en las últimas décadas, la paja utilizada para las techumbres ha sido reemplazada por planchas de zinc, y la piedra de los muros, por bloques de cemento. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Santuario de Nuestra Señora Guadalupe de Ayquina y atrio. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. El Santuario de Nuestra Señora Guadalupe de Ayquina es parte de un conjunto de templos cristianos levantados en distintas localidades de Atacama. El templo está rodeado por un muro perimetral que define un atrio de importantes dimensiones. En este espacio, considerado sagrado por la comunidad, se ubican cuatro altares-mesa, donde se posan las imágenes de la Virgen de Guadalupe y de los santos durante las festividades. La principal de ellas se celebra el 8 de septiembre, día en que miles de peregrinos acuden a venerar a la patrona del pueblo. Clotilde Cruz, nos cuenta de este lugar: “Cuando tenemos la fiesta de la Virgen… la traemos en procesión y la Virgen se posa acá, y a San Roque, San José, en andas no más…el que está de santo va al último”. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Clotilde Candelaria Cruz Ayavire, comunera de la Comunidad Atacameña Ayquina-Turi. Ayquina, Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. La Comunidad Atacameña Ayquina-Turi forma parte del pueblo Atacameño o Lickanantai, reconocido por la Ley N.o19.253 como uno de los once pueblos indígenas que habitan el territorio chileno. Como vicepresidenta (2021-2022) y presidenta (2022-2023) de dicha comunidad, Clotilde Cruz ha impulsado importantes iniciativas para el progreso y puesta en valor del poblado de Ayquina. En 2024 fue designada fabriquera del Santuario de Nuestra Señora Guadalupe, como se denomina a la persona responsable del cuidado de la iglesia y sus imágenes devocionales. Además, fue elegida purikamani, autoridad comunitaria encargada de dirigir la limpia de canales, entre otras funciones. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Ejemplo del sistema constructivo tradicional andino en la Zona Típica Pueblo de Ayquina. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Vivienda andina tradicional ubicada en el pueblo de Ayquina. De planta rectangular, sus fundaciones y muros fueron construidos en mampostería de piedra con morteros de barro. En sus esquinas se destaca el trabajo de cantería y la utilización de piedras de mayor tamaño. Su techumbre, de dos aguas con pendiente pronunciada, está constituida por una viga cumbrera y una serie de tijerales o pares. Tanto estos como los dinteles de puertas y ventanas son de madera de cactus cardón (Echinopsis atacamensis). Para la cubierta se empleó paja brava, paja ichu o ichu (Stipa ichu) y torta de barro. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Trabajos comunitarios de limpia de canales en el embalse de Turi. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Tal como en otras localidades de Alto Loa y del salar de Atacama, la Comunidad Atacameña Ayquina-Turi utiliza un sistema de riego por inundación para regar sus cultivos. El sistema opera por turnos, y las personas regantes se encuentran organizados en una Junta de Riego. El embalse de Turi –de 100 m2 de superficie y 3 m de profundidad– es parte esencial de la infraestructura de riego que hace posible la agricultura en estos poblados altiplánicos. Se ubica unos 6 km al norte de Ayquina y fue construido hace más de 30 años con aportes obtenidos por los regantes mediante un crédito Indap. Diez días antes de la limpia de canales, el embalse es vaciado. La noche previa a los trabajos, en el sector Baños de Turi se realiza el huaque, ceremonia en la que se ruega por el éxito de la empresa. “Es el pago que se realiza a la Pachamama, donde se pide que todo salga bien, que tengan agua para regar”, explica la comunera Evelyn Copa. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Faenas de limpieza de canales en el embalse de Turi. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Una de las tradiciones más importantes de la Comunidad es la limpia de canales. La actividad se celebra durante los primeros días del mes de noviembre, congregando a hombres, mujeres, niñas y niños que trabajan mancomunadamente para remover los residuos acumulados y asegurar así el normal paso del agua. “Todos vienen a trabajar porque el agua es un elemento vital acá en este desierto”, señala la comunera Virginia Panire. Al fondo se visualiza el volcán Paniri, nombre de origen atacameño (5.946 msnm), reconocido por la comunidad como un cerro tutelar o mallku. Los mallkus son antiguos espíritus de protección presentes en la cosmovisión del área surandina. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Virginia Panire, comunera de la Comunidad Atacameña Ayquina-Turi. Embalse de Turi, Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Desde el año 2020, Virginia Panire es la coordinadora pastoral del Santuario de Ayquina. Junto con la fabriquera, los pasantes y los alféreces del templo, tiene la responsabilidad de organizar las distintas celebraciones religiosas que se ofician durante el año, entre ellas, la natividad de la Virgen. Conocida popularmente como “Fiesta de la Virgen de Ayquina”, esta festividad se desarrolla durante los primeros días de septiembre y congrega a miles de peregrinos y danzantes de todo el país. Entre 2020 y 2022, Virginia desempeñó el cargo de secretaria de la Comunidad Atacameña Ayquina-Turi. En esta, señala, “el rol de la mujer es muy importante, porque la mujer acá es agricultora, es ganadera, es la que guarda las semillas, es la que cuida el ganado. Es la que produce el queso, esquila, hace artesanía y se encarga de todo aquello que se mantiene vivo”. También es la que se encarga de traspasar estos saberes y asegurar su continuidad en el tiempo. En el caso de Virginia, fue su madre quien le enseñó sobre la agricultura, la ganadería y el oficio textil. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Evelyn Copa, comunera de la Comunidad Atacameña Ayquina-Turi. Embalse de Turi, Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Evelyn Copa es artesana textil. Desde 2018 vende sus productos –figuras de vellón representativas de animales de la zona– en un quiosco ubicado detrás del Santuario de Ayquina. Participó como maestra en el proyecto de Obras de Emergencia de la Kallanka del Monumento Nacional Pukará de Turi (2021) y colabora de manera activa en los trabajos comunitarios. “Es importante seguir participando, venir y seguir invitando a las generaciones que vienen. Enseñarles, para que no se pierda”, señala. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Sistema de cultivo tradicional en melgas, sector Turi Alto. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. Las melgas son compartimientos de tierra de extensión variable y diferentes alturas, separadas entre sí por pretiles de tierra apisonada de aproximadamente 50 cm de alto por 50 cm de ancho. En el sector de Turi Alto, las melgas miden aproximadamente 30 m de largo por 20 m de ancho. Para preparar la tierra, primero se abona con estiércol o guano de animales, luego se riega y, por último, se rompe. El cultivo principal es la alfalfa, especie que resiste mejor la salinidad del suelo y del agua, aunque las comuneras y los comuneros también siembran trigo, maíz, habas, cebollas y zanahorias. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.

Faenas de limpieza de canales en el embalse de Turi. Región de Antofagasta. Noviembre de 2024. La participación en los trabajos de limpieza de canales es proporcional a la extensión de las tierras de cultivo. “Las personas que tienen más hectáreas de terreno riegan más días o más horas, entonces tienen que poner más trabajadores. Por ejemplo, si una persona riega 3 días, tiene que poner 3 trabajadores, y si una persona riega medio día o 1 día, solamente 1 trabajador”, explica la comunera Virginia Panire. En relación con la distribución de las labores, la comunera Clotilde Cruz afirma que “la mujer y el hombre trabajan en lo mismo, cada uno hace su pega. Nosotras a lo mejor no podemos hacer el mismo trabajo, pero sí algo más liviano”. Niñas, niños y jóvenes también se involucran: “Así van conociendo lo que son los trabajos comunitarios y las costumbres que tiene la comunidad”, señala Virginia Panire. Fotografía de Alejandro Cortés Flores.